JUDITH con la cabeza de HOLOFERNES
Dibujo de Isabel Cantero Sánchez
Grafito, Tiza y Pastel
Mis tristes ojos se pierden en la inmensidad de la lejanía de este paraje solitario en el atardecer de la oscura noche que llega, y escucho el susurro de tus palabras...preguntando !donde iremos ahora.!
No importa donde iremos...importa lo que hemos sido capaces de hacer y estamos juntas. Seguiremos... y donde halla tiranía y esclavitud intentaremos que desaparezca por siempre. Pues esto es el camino que nos espera.
De pie armadas y juntas, nuestras armas para la lucha son belleza e inteligencia y el enemigo es un gran monstruo con una poderosa fuerza que por donde va nos devora a todos, es insaciable, y quiere ser el amo del mundo.
!Quiero volver a la seguridad de la casa y servir con amor a mi señora.!
Mira lo que llevas sobre tu cabeza en esa cesta, es el empezar del fin de una tiranía de asesinos poderosos, y no vamos a parar hasta conseguir un mundo mejor para todos y no descansaremos hasta que ese gran monstruo desaparezca.
Tú callas y me miras entregada y confiada al impulso decidido y renovador que nos puso en camino ejecutando lo que no tiene más remedio que ser extirpado. Se lo que tus ojos sinceros e inocentes preguntan... sí, te digo, no será fácil, creo a demás, que va a ser muy difícil. Solo en guardia y en el camino estaremos dispuestas a seguir lo que haga falta hasta el final.
! Somos todo un pueblo del mundo tragados por las fauces pestilentes de la voracidad sin medida del corrupto perverso y degradado animal de las mil cabezas.!
Todos podemos acabar con el, todos saliendo al camino, todos con un mismo objetivo, y caerá para no levantarse nunca jamás.
Ahora arrímate a mi y no te pierdas en la gran oscuridad que viene, siempre amanece para poder seguir el camino, con la nueva luz del día.
Conversación de la viuda Judith y su sirvienta a la vuelta del campamento del Rey Holofernes con su cabeza cortada, hace muchos... muchos siglos.
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